Mis conferencias están pensadas para mover, inspirar y generar reflexión real.
No son charlas sobre teoría digital: son espacios donde las personas comprenden cómo la tecnología influye en su atención, su descanso y su manera de trabajar.
Cada conferencia combina divulgación, emoción y herramientas prácticas, para que la inspiración no se quede en el auditorio, sino que se traduzca en acción.
Todas las conferencias pueden realizarse de forma presencial u online, y se adaptan a las necesidades de cada evento y audiencia.
Presenciales o virtuales (30 a 60 minutos) para congresos y eventos empresariales
Para jornadas de bienestar o liderazgo.
Sesiones participativas con Q&A y dinámicas de reflexión
Cómo recuperar la capacidad de atención y aumentar la productividad en un entorno plagado de distracciones digitales.
Metodologías y estrategias para asegurar la desconexión digital y combatir el tecnoestrés y el burnout digital.
Herramientas, dinámicas y nuevas habilidades para liderar con éxito equipos híbridos y remotos.
La hoja de ruta definitiva para recuperar el equilibrio, redefinir límites y trabajar en la mejora integral del bienestar digital.
Cada evento es único y por eso cada conferencia o taller también lo son.
Adaptaré todos los contenidos a la medida de tu audiencia y asistentes. Por eso, toda la información que puedas ofrecerme acerca de sus inquietudes y preocupaciones será bienvenida.
Mientras que la conferencia está diseñada para ofrecer información a la audiencia, siempre desde un enfoque práctico, riguroso y accionable; en el taller se busca la participación activa de los asistentes. Es decir, tu audiencia pasará de ser espectadores a protagonistas principales, involucrándose en dinámicas y actividades guiadas.
No te preocupes. Estoy aquí para ayudarte.
Puedes contactar conmigo a través del formulario de contacto de mi página web o enviándome un email a hola@miriamurbano.com.
Me pondré en contacto contigo a la mayor brevedad para resolver todas tus dudas.
Cuidar el bienestar digital de tus equipos no solo mejora la productividad,
también mejora la forma en la que trabajan, piensan y se relacionan.